Llegar a Japón es una experiencia increíble desde el primer momento. Apenas bajas del avión, quien te da la bienvenida en el aeropuerto son nada más y nada menos que los personajes de Mario Bros. Japón siendo Japón, claro.
Como quería estar conectado en todo momento, renté un módem portátil con 20GB al día para usar tanto mi celular como la computadora sin problemas. ¡Y funcionó perfecto, incluso en el Shinkansen, el famoso tren bala! Durante el viaje, aproveché para comprar una caja con comida, algo que es costumbre entre los japoneses al viajar en tren.
Otra cosa que me impresionó fueron los baños del tren: estaban excesivamente limpios y, por primera vez, usé un baño con bidet. ¡Qué descubrimiento! Definitivamente voy a comprar uno de esos al regresar a México, ¡no puedo creer que haya vivido tanto tiempo sin uno!
Aquí va una pequeña crónica de mi primer día, pero seguro seguirán muchas más historias de este increíble país.
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